Sonreir es Innovar

Ayer volvimos de un viaje de trabajo en Cambridge en donde estuvimos hablando sobre lo que hacemos. En el aeropuerto de Londres, al pasar el control de seguridad, nos dimos cuenta de que los empleados estaban sonriendo. No sé si estáis acostumbrados a viajar en avión y si vais de vez en cuando a la T4 ... si no pisáis el aeropuerto os podemos asegurar que no veréis muchos vigilantes de seguridad sonriendo.

Por eso nos llamó tanto la atención. Antes de abrirnos la maleta nos preguntaron, con una gran sonrisa: "¿qué tal estás?". Y luego, "¿no te importa que abramos tu maleta?". El motivo era que no habíamos sacado los líquidos, tal y como manda el reglamento, y no los habíamos puesto en una bolsa transparente. O sea, que no lo habíamos hecho según mandaban las instrucciones. Mientras buscaban los líquidos dentro de nuestras maletas nos decían "perdona, ¿puedo ver que hay debajo de esta ropa?". Aunque no lo creáis es verdad, no tocaban nada de dentro de tu maleta sin pedirte antes permiso.

Y cuando descubrieron los líquidos ... ¿nos regañaron? ¿nos pusieron mala cara?

Pues no, siguieron sonriendo y dijeron, "bueno, no pasa nada, a todos nos ocurren estas cosas ... ¡que tengáis buen viaje!". Sí, ya sé, eran botes pequeños, no era peligroso, pero no los pusimos a la vista en las bolsas transparentes.

Seguimos sin creérnoslo, de verdad. A veces hay empresas que nos dicen que no pueden inventar nada nuevo en su organización, que ya todo está más que visto. Podríamos empezar por aquí: "¿Habéis alcanzado el máximo nivel de sonrisa?"

Por hoy no está mal.