España y Los Mundiales

Recuerdo muy nítidamente las ilusiones puestas en el Mundial de España de 1982. Recuerdo cómo en el colegio hice un trabajo en la asignatura de "Plástica" con la mascota del mundial, Naranjito. Recuerdo también cómo pensábamos que España era la favorita para ganar porque tenía a unos magníficos jugadores  que yo conocía de memoria: Arconada, López Ufarte (mi favorito), Zamora, Satrústegui, Santillana, Juanito ... Y recuerdo la decepción de la derrota ante Irlanda del Norte y la definitiva ante Alemania.

Todos estos años desde aquel primer Mundial han sido una repetición del año 1982: grandes ilusiones desde el comienzo, jugadores magníficos ... y derrotas.

España tenía una marca personal, algo que le diferenciaba del resto: la furia. Se decía que este elemento era el que nos caracterizaba. Ahí estaban Juanito, Gordillo, Camacho, Luis Enrique, Goicoechea ... un sin fin de jugadores que encarnaban el espíritu de lucha. Yo veía a otros equipos dejarse la piel en el campo en todos estos mundiales y me preguntaba: "¿de verdad es La Furia lo que nos hace grandes?". Siempre he pensado que si era "La Furia" lo que nos definía en el fondo estábamos subestimando al adversario. Yo no estaba de acuerdo en que el resto de equipos salieran al campo con tirachinas mientras  el equipo español utilizara acorazados.

La selección española se ha reinventado. Es increíble, ya nadie habla de "La Furia". Por fín se han dado cuenta que "La Furia" no es una marca distintiva sino algo que acompaña a cualquier selección que acude a un mundial. Sin darnos cuenta hemos sustituido "La Furia" por "El Tiqui-Taca". En esto sí somos singulares, no hay nadie que nos haga sombra. Nadie juega con el dominio del balón con que juega España, no sólo en este Mundial sino desde la Eurocopa del 2008. Esa lección magistral de fútbol impartida, curiosamente, por un holandés (Cruyff) en el F.C.Barcelona es lo que nos permitirá esta noche ganar a Holanda.

Todos necesitamos una razón de ser, una identidad, un argumento que nos haga únicos. Cuando no lo tienes la única salida es preguntarte una y otra vez para poder reinventarte.

Faltan menos de 4 horas para el partido. Aún así, estamos seguros de la victoria del equipo español.