Esta semana estamos en Bilbao, participando en el Creativity Meeting Point que organiza Creativity Zentrum. En un marco incomparable y un sol casi espléndido hemos podido escuchar a magníficos profesionales de la creatividad, pero sobretodo a profesionales que se han dedicado a enseñarnos la necesidad de volver a los juegos para aprender. Puede parecer una locura, pero los videojuegos sirven para algo más que para pasar una tarde de domingo entretenida. Muchos de estos profesionales han creado juegos estupendos con los que los médicos aprenden a tratar con el paciente, los empresarios aprenden a ser más creativos o incluso los niños entienden la necesidad de empatizar con los que nos rodean.
Ha sido una jornada intensa, en la que, con los "ojos abiertos como platos" hemos podido descubrir que la realidad virtual puede ser nuestra próxima compañera de viaje, ¿no es genial?, y además, todo esto es fruto de ideas creativas y de la apuesta por la innovación.
Uno de los mejores momentos de la jornada ha sido el del taller de Lego, "lego serious game", en donde, a pesar de que hemos tenido poco tiempo, hemos llegado a comprender la importancia que tienen nuestras manos en los procesos creativos, porque son las que nos guían. Hacía mucho tiempo que no nos "enfrentábamos" al Lego, y ha sido estupendo, nos hemos sentido libres por un momento para construir y crear, una experiencia que os recomendamos.
Pero el día no acababa aquí y parece que lo mejor estaba por llegar, la charla de Mark Davis y Tina Catlin ha sido un soplo de aire fresco, nos hemos reído, hemos dibujado, hemos participado, pero sobretodo hemos comprendido que la creatividad es algo que debemos entrenar, no sólo para mejorar nuestro negocio sino también para ser mejores personas.
Acaba la jornada y sabemos que mañana nos espera un día duro, tenemos que dejar descansar las ideas que ahora revolotean sin cesar en nuestra cabeza. Y ¿qué mejor manera que salir a disfrutar de la maravillosa gastronomía bilbaína?
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